Uno de los ingredientes para que en comunicación algo funcione es ser capaz de sorprender porque no esperabas lo que iba a suceder. Es decir, llevar a cabo una buena gestión del factor sorpresa.
Esto es lo que sucede con la campaña Pandora Project para luchar contra la pobreza en Perú, llevada a cabo por la asociación TECHO. Han sabido utilizar a la perfección el fenómeno viral de Internet para conseguir difundir su mensaje, y al mismo tiempo, concienciar a la población.
¿Cómo lo han conseguido? Mediante un engaño masivo, o también conocido como trolleada. Para dar a conocer la situación de pobreza entre la población del país de repente apareció una supuesta diseñadora llamada Pandora que con su campaña "Don't be poor, be fashion" quería tapar la pobreza porque se daba una mala imagen del país.
¿Qué sucedió? Pues que fue todo un exito, al ver las intenciones de esta diseñadora se consiguió poner el tema en la palestra y todo el mundo la criticaba porque tapar la pobreza no es una forma de solucionar el problema. Cuando se destapó la verdad todo la mayoría de las personas estaban familiarizadas con el asunto y la fundación TECHO consiguió unos buenos resultados a partir de esta acción, puesto que tras ver como se quería frenar el problema en un primer momento la población adquiere conciencia de que, para nada, aquel era el camino a seguir y se implicaron en una mayor medida que con otras campañas.
Desde el punto de vista comunicativo es una acción espectacular, nada fácil de conseguir porque en un primer momento saltaron las alertas y hay que ver como se tomaría la gente el hecho de que los estuvieran engañando... Pero, ¡quien no arriesga no gana! Y en este caso los resultados han sido buenos.
Y a vosotros, ¿qué os parece?
¿Seríais capaces de gastar una pequeña broma al público o lo veis excesivamente arriesgado?
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